La secretaria de Estado de Defensa clausura la Asamblea General de TEDAE donde ha participado el director del Departamento de Seguridad Nacional
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La Asociación Española de Empresas Tecnológicas de Defensa, Seguridad, Aeronáutica y Espacio (TEDAE) ha celebrado su Asamblea General, que clausuró Amparo Valcarce, secretaria de Estado de Defensa. En el acto participaron numerosas autoridades. El director del departamento de Seguridad Nacional, General Miguel Ángel Ballesteros, impartió una conferencia sobre el papel de la industria y la tecnología frente a los riesgos y amenazas globales.
Ricardo Martí Fluxá, presidente de TEDAE, en sus palabras de bienvenida ha realizado un balance de los principales hitos de 2022 y ha destacado la importancia de las industrias de Defensa, Seguridad, Aeronáutica y Espacio y ha afirmado que “TEDAE es el espejo de estas industrias y, si queremos que cada vez sean industrias más fuertes, tenemos que insistir en la colaboración público-privada”.
Por su parte, César Ramos, director general de TEDAE, y Clara Tébar, directora de operaciones de TEDAE, han puesto en valor los principales avances de los sectores de Defensa, Seguridad, Aeronáutica y Espacio en el pasado año, así como las actividades de sus comités y grupos de trabajo.
El director del Departamento de Seguridad Nacional ha analizado en su intervención la evolución de los tipos de seguridad a lo largo de los últimos años y ha puesto en valor el papel de la tecnología: “La tecnología es clave para la disuasión, a nivel colectivo y de amenazas no compartidas. Es una herramienta de disuasión y es el diferencial tecnológico el que gana las guerras”.
Finalmente, la secretaria de Estado de Defensa ha clausurado la jornada destacando el cambio en la conciencia social por la guerra de Ucrania, que ha hecho a españoles y europeos sentir cada vez más cerca los riesgos, asegurando que “tenemos que dar un salto cualitativo para conseguir que Seguridad y Defensa sigan siendo uno de los objetivos del país”.
Asimismo, ha destacado la importancia de la colaboración público-privada, nacional y europea y “la necesidad de maximizar la independencia estratégica, para diseñar y fabricar en España para generar crecimiento económico y riqueza nacional”.
